Esto fue lo que le pregunté a mi querida Natalia Traven, actriz, directora y productora mexicana, quien fue la protagonista de Cry Macho, la más reciente producción de nada más y nada menos que Clint Eastwood.
Multifacética y muy trabajadora como actriz, docente, directora de escena y productora escénica, egresada del Núcleo de Estudios Teatrales, con especialización en el método de Strasberg en The Lee Strasberg Theatre Institute en Los Angeles, California, se formó con catedráticos como Ludwik Margules, Benjamín Cann, Jorge Fons, Arturo Ripstein, entre otros.
Bueno, ahora se encuentra produciendo y actuando la puesta en escena Abraszarte, drama y glamur en una historia que refleja la relación entre madres e hijos; tema de análisis científico, sobre todo en México, donde los hombres somos maternados, lamentablemente, casi de por vida.
Esta puesta es bajo la dirección de Alonso Íñiguez; protagonizada por un gran elenco, encabezado por Natalia Traven, Pedro Mira, Alejandro Morales, Pablo Marines y Paloma Arredondo.
Está basada en el texto de Michel Marc Boucharda adaptado para el público mexicano.
Abraszarte cuenta la historia de Hugo, un apasionado de la moda, quien logra conectar de manera profunda con el genio Yves Saint Laurent, quien le sirve de inspiración para comenzar a trazar su propio camino en el arte de la alta costura.
Entre consejos de su ídolo y fantasías confeccionadas con telas, Hugo cose la tela como toda relación humana, ambivalente, única y profunda que sólo una madre y un hijo pueden tener.
Entre costuras se muestra el amor y la violencia. Se construye y deconstruye la relación a través de la pluma de Bouchard, experto en diseccionar a profundidad toda relación humana y particularmente la relación intrafamiliar.
“Madre e hijo se muestran humanos, sensibles, amorosos y a la vez violentos.
Parten del dolor de querer proteger a quien se ama, rodeados de telas y de belleza; una belleza que pueda vestir el dolor de un juicio en el que Hugo pretende resignificar y dignificar a su madre porque madre sólo tenemos una”, dice el autor sobre Abraszarte.
Alonso Íñiguez, director de la puesta, habla acerca de ésta: “Sí, es escabrosa, pero Bouchard tiene una forma de escribir, en donde la oscuridad se vuelve cómica. Todas las obras de Bouchard que yo conozco tienen este aliento y esta noción de un dolor que acaba volviéndose absurdo y en cierto lugar cómico y eso pasa en Abraszarte.
Entramos en lugares que son complicados, pero automáticamente Bouchard nos lleva a un sitio en donde nos estamos riendo de la desgracia ajena y eso se vuelve muy atractivo desde el texto. Es un texto muy poético sin ser rebuscado; es algo muy bello”.
Natalia comenta en su faceta de productora de la obra: “Me gusta montar una historia así de sólida con un dramaturgo inteligente y con sentido de humor, aunque se trata de un tema bastante profundo e intenso.
Lo que me llama mucho la atención aquí es la capacidad que tenemos los seres humanos de transformar el dolor en creación. Cualquiera se puede identificar con esta obra, ya que todos tenemos madre y sea como sea que se haya dado la interacción es un vínculo primario muy importante”, dijo.
Tener la presencia de Yves Saint Laurent en esta obra hace que el tema de la moda se toque con profundidad, sin embargo, también funciona como detonador, para llegar a todos los asuntos que hacen de Abraszarte un impactante coctel de emociones.
“Yves Saint Laurent narra cómo a través de la moda encuentra la belleza y cura su dolor. Entiendes por qué la moda era tan importante para él, a partir de todas las violencias que él recibió de niño. Fue un inmigrante a partir de la guerra, tuvo una madre que fue violada en muchas ocasiones, venía de un extracto social de clase baja y hay una cantidad de circunstancias que lo rodeaban y cómo en la moda pudo sublimar ese dolor que tenía dentro, todas esas depresiones.
Estuvo internado en un psiquiátrico, mucho, mucho tiempo, le dieron electroshocks; en fin, pasó por muchos lugares violentos y conoceremos cómo la moda se convirtió en su lugar seguro”, menciona Alonso Íñiguez.
Natalia tiene en su haber más de 40 puestas en escena, entre las que destacan Las mareas vuelven de noche, Les Funambules, Don Juan Tenorio para el claustro de Sor Juana, Tom Sawyer, El Viaje Superficial de Ibargüengoitia, Lo que no se dice de Tennessee Williams, Las referencias a Salvador Dalí me excitan en el teatro El Granero, La casa de Bernarda de Alba de Federico García Lorca, Una relación pornográfica de Phillipe Blasband.
En su labor como productora escénica, se ha desempeñado con proyectos escénicos como Tom Sawyer, Error humano, Sombras y murmullos de Pedro Páramo de Juan Rulfo, El Principito de Antoine de Saint-Exupéry, Las criadas de Jean Genet, ContraSujeto de Juan Trigos, obteniendo premio como mejor actor en el Festival Internacional de Monólogos de la Tigra-chaco en Argentina.
En televisión ha encarnado a personajes para múltiples telenovelas, cápsulas y series como Agujetas de color de rosa, Pueblo chico, infierno grande, Ángela, Sin ti, El derecho de nacer, Mujer casos de la vida real, Familia Peluche para Televisa y Bizbirije, niñas promedio para Canal 11, así como Página cero en canal 22.
Ha colaborado en proyectos publicitarios para marcas como Chocoleche de Kellog´s, KFC, Lactaid en L.A. California, Teletón y CNDH.
En cine, ha participado en múltiples proyectos como Collateral damage al lado del maestro Jorge Zepeda, (Warner Bros.), Cuento de hadas para cocodrilos (Imcine-Malayierba), Romancing the Bride (Oxygen T.V. New York) y su más reciente éxito internacional Cry Macho, dirigida y protagonizada por Clint Eastwood, producción de Warner Bros pictures.
Hablar de la madre en México es algo muy sagrado, pero en un país en el que ellas son las que educan sería bueno preguntarnos, ¿por qué hay tanto machismo y por qué muchos hombres no pueden cortarse el cordón umbilical para independizarse y ser adultos funcionales?
Al final, todos sabemos la respuesta. La cuestión es por qué no cambiamos y seguimos en ese círculo vicioso.
¿Será por conveniencia de ambos?
Abraszarte se presenta en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, en Ciudad de México, del 4 de mayo y hasta el 23 de junio de este año.
Las funciones son los viernes a las 20:00 horas y sábados y domingos a las 18:00 horas.
La columna de esta semana ha terminado. Pueden ir en paz.