El Paris Saint Germain volvió a otro fracaso monumental en la Champions League, perdió en Munich a manos del Bayer por marcador global de 3 a 0 lo que noveno año consecutivo no puede conseguir tan ansiado trofeo que es la obsesión de los dueños del equipo los Emires de Qatar. Técnicos, jugadores, directivos han desfilado por este equipo de la capital francesa en busca de tan esperado título.
No basta con tener a Messi, Mbappe y Neymar (lesionado) para aspirar a estar en la elite de los grandes, $1400 millones de euros después el PSG sigue sin poder levantar la orejona. En el 2020 es cuando más cerca estuvieron de obtenerla, pero enfrentaron a uno de los equipos grandes en historia y económicos como lo es el Bayern Munich que nuevamente en esta temporada los deja fuera y sin poder tener aspiraciones más que a los trofeos internos del país galo.
Messi junto con su familia ya no saben si seguir en Paris o aceptar otra oferta millonaria del medio oriente o de la MLS porque no ven el fin de está maldición con el PSG y también con ellos mismos que desde que salieron de Barcelona no ha podido conquistar nuevamente la gloria europea. Mbappe, por su parte solo declaró que quiere ganar la liga local y después pensará en su futuro que todo apunta al Real Madrid.
Directivos como Leonardo y Nasser Al Khelaifi compran y compran jugadores de renombre sin poder obtener el mayor deseo para los dueños del estado de Qatar. Técnicos también han desfilado como Ancelotti, Tuchel, Pochettino, Emery personajes de renombre internacional que por más que han querido no ha podido. Este año buscaron en el mercado local y trajeron a Luis Campos (Mónaco) y Galtier (Lille) como director deportivo y entrenador respectivamente para ver si la fórmula cambiaba y resulto que sucede exactamente lo mismo, inclusive se habla que ninguno de los dos continuará.
Desde mi perspectiva el problema no es a quién compre o cuanto técnico y directivo traiga, el problema radica en el contexto de la ligue one, una liga que no es competitiva, que es fría, que le interesa a muy pocas personas, con jugadores desconocidos en su mayoría y que se vuelve de un solo equipo año tras año como los es el Paris Saint Germain. Cuando el PSG juega semana a semana con equipos de bajo nivel pues se adaptan a ese tipo de juego saliendo con goleadas y sin despeinarse. En cambio cuando juegan la Champions no tienen o muy poco el nivel para enfrentar dicha competencia a la cual se debe llegar a tope.
Si el PSG con todo ese poderío ayudará a la liga local a desarrollarse y colocarse entre las dos o tres mejores de europa el mismo nivel de los equipos haría que el propio PSG subiera su nivel y por obvias razones el de sus jugadores. Esta el caso como ejemplo del Bayern Munich que al ayudar a equipos como el Borussia Dortmund, Salzburg, Sttutgart, Union Berlin entre muchos otros, la Bundesliga se posicionó de manera rápida como un destino importante para jugadores en proceso pero que ya traían un nombre importante. Inclusive el gigante bávaro le ayudó al Dortmund a salir de la crisis económica y lo revalorizo a pesar de ser su enemigo deportivo todo esto con el objetivo de hacer crecer la liga y los resultados saltaron a la vista porque el mismo Dortmund llegó a finales de europa, el Salzburg está compitiendo de tu a tu con los grandes de europa y que decir del Unión Berlin que está peleando con el Bayern el campeonato local. .
El contexto desarrolla o involuciona a una persona, una comunidad o en este caso un equipo deportivo. Si no hay nivel o competencia los equipos se estancan en lo mismo haciendo de este tipo de torneos aburridos. Muchos me dirán en la LIGA MX pasa algo similar, pero ese ya es otro tema que después tocaremos.
Por muchos billetes que le ponga el PSG le va a costar sangre, sudor y lágrimas mientras no ayude a la ligue one a crecer para tener un mejor nivel que compita con los grandes equipos de otras ligas como la española y sobre todo con la Premier League de Inglaterra. El Manchester City es otro caso como el del PSG que por más dinero que pongan los trofeos no llegan por racimos, aunque en su liga hay bastante competencia y no dudo que pronto alcanzará esa gloria deportiva.
